Saturday, April 29, 2006

Diecinueve veces busqué una solución lumínica


‘He tocado las estrellas’, me dijiste susurrando, y tenías cicatrices que podían demostrarlo.”
Ahora conviértete en azul, como el cielo y el mar, el color más abstracto de la naturaleza tangible y visual. Y regresa por las noches a disfrutar de la creciente amplitud. “Ven y tráeme síes y noes”. Entra en la fortaleza de arriesgadas letras no argumentales que invitan a observar los versos como fotogramas, como secuencias sin guión. Escucha desde el vacío, la única forma posible, la poesía embebida. Una vez dentro verás un original paisaje de colinas sembradas de alfileres que invita a compartir la melancolía del ser que llora lágrimas de sangre.

...

No sé cómo se hace. No encuentro la manera de empaquetarlo todo y lanzarlo por la ventana. No encuentro las palabras para escribir una carta con remitente oculto. No puedo verbalizar aquello que me araña. Simplemente no puedo. Y es curioso porqué siempre he tenido facilidad para racionalizarlo todo, para sacar conclusiones de mis análisis exhaustivos. Ahora no puedo. Quizás es que he dejado de creer. Creo recordar que una vez me preguntaron “¿Tú en qué crees?” y no supe responder. Yo no creo en nada sobrenatural, no creo en políticos, no creo en sectas, no creo en equipos de fútbol, ya nisiquiera creo en Dios....

Si creo, sin embargo en el que tengo al lado. Creo en la palabra, en la comprensión, en la confianza. Es algo abstracto, pero mi acto reflejo ante las relaciones humanas.. Me faltan palabras. Sólo he dejado de creer

Wednesday, April 26, 2006





Qué raros son los recuerdos que nos hacen disfrutar de una felicidad de la que no nos dimos cuenta y con la que no fuimos felices"

Monday, April 17, 2006

mis ojos


Estaba durmiendo y un duende ha entrado en mis ojos. No sé si es el mismo que te deja un regalo debajo de la almohada cuando se te cae un diente. Puede que sí. Ha entrado y me ha apagado la luz. "¿Para qué la quieres si no la usas?". Dice que todos tenemos una luz en cada ojo y que él las controla. A mí me las ha apagado las dos. Ni lo he notado. Después me he mirado en el espejo y no había ni una chispa en ellos. Entonces lo he notado. Yo creía que sí las usaba, al menos cuando me alegraba por algo. Pero él dice que no, que ese no es el uso de la luz del ojo. No me ha querido explicar cuál es, dice que me daré cuenta cuando me las vuelva a encender

Thursday, April 06, 2006

Con estos ojos veo

Me han preguntado la razones por las que no puedo despegar la vista hacía la oscuridad. Y no he encontrado respuesta.
Recuerdo haber estado a oscuras. Es una sensación espantosa. Me he mirado al espejo y he visto a esa niña de 11 años que lloraba lágrimas de sangre.

He vuelto a ver esa imagen que pensaba que estaba borrada de mi memoria, esa niña que se miró al espejo sin quererlo y descubrió que de su ojo estaba saliendo un río de sangre. Pero no había miedo en su mirada. ¿Cómo podía esa niña contemplarse con calma mientras todo a su alrededor eran gritos, llantos y prisas? ¿Cómo podía esa niña ser tan valiente y esta otra que ahora se mira al espejo tan cobarde?.


Recuerdo la sirena de la ambulancia. Recuerdo no ver nada. Recuerdo oír los llantos de mi madre. Recuerdo oír susurros a mi alrededor, conversaciones que se tapaban. Recuerdo que la última imagen que retuvo mi retina, una retina que luchaba por desprenderse y desbordarse para conseguir la libertad, la última imagen durante meses de ceguera fue la de esa niña mirándose al espejo mientras lloraba sangre.

Y aún así es extraño porqué aquella niña inmóvil atrapada en una cama de hospital con los ojos grapados no estaba triste. Era toda esperanza, era toda inconciencia.

Cada día se despertaba y todas las enfermeras y las visitas reían con ella. Pasaba horas y horas sin hacer nada, sin ver nada… sin ver nada… sin ver nada… y mientras tanto decía “Bolita, cuéntame más cosas de tu vida”, “Mami, no te preocupes que yo estoy bien”… y no podía ver pero veía las sonrisas de los demás cuando observaban a aquella niña pequeña enclaustrada en una cama pero extrañamante contenta.

Esa niña aprendió a esperar con paciencia. A observar sin los ojos. Y volver a esperar. A escuchar el silencio. Y dejar pasar el tiempo. A pensar.

Luego esa niña se perdió y volvió al recordar ese momento, cuando el, estuvo en esa misma situación. Acostado en la cama, sin fuerza y sin poder decir palabra alguna, pero sonriendo, aveces solo observandome con las manos.

¿Qué le paso a esa niña que había dado sentido a la oscuridad?¿Qué le paso?¿qué?

Saturday, April 01, 2006

Amarga soledad

Amarga soledad la que me invade.
Amarga soledad que no se aparta de mí
y yo aquí continuo esperando por tu amor.

Un amor que revivió mis más íntimos instintos de mujer,
un amor al cual añoro desde lo más profundo de mí ser.

Una batalla de sentimientos es la que lucho a cada instante.
La razón me dice que deje todo atrás
y mi corazón me grita que no te deje por que eres mi felicidad.

Amarga soledad que es mi único refugio
cuando la agonía es mi consuelo.

Es tanto lo que siento que ni mil palabras
podrían expresar el llanto de mi corazón,
que aunque trato de llamar a mi raciocinio,
este está oculto en algún lugar perdido
y solo la pasión se hace presente y no puedo,
no puedo, no quiero apartarte de mi.

Amarga soledad es mi compañía
y una eterna espera es mi agonía.



Ira Rojas
***
Creo que los sábados se han convertido en los días en que te lloro más y en los que el sentimiento de soledad se intensifica de una manera enferma...
El rencor cobra fuerza y me convierto en ser venenoso que se agrede a si mismo al no encontrar a culpables a quienes...matar... no puedo matarme a mi misma.
Si, me siento culpable.
.....
no puedo escribir mas...